El viernes 04 y sábado 05 de Diciembre 2009 se efectuaron las jornadas de la II CONFERENCIA PASTORAL REGIONAL AVIVA PACASMAYO “Preparándonos para el Avivamiento”, en las instalaciones de la iglesia “Nuevo Milenio Perú”, calle Alcides Carrión 820, en la bella ciudad de Pacasmayo.
Con una masiva asistencia de pastores y líderes de lugares cercanos que llenó las instalaciones, desde el inicio del evento, en la adoración del grupo de alabanza, el Espíritu Santo se movía en el ambiente y luego, en las conferencias del Ps. Aparicio sobre “Administración de la Iglesia y Estrategias” y enseguida del Ps. Zárate sobre “El Espíritu Santo”, para desafiar, animar, edificar y consolar a los pastores y líderes presentes, terminando con tiempos de profunda oración, llanto de arrepentimiento y consagración a Dios.
En la noche del viernes, se complementó con la conferencia “El que tiene sed, venga a mí”, sobre el Espíritu Santo, saciando la sed de las personas por el Ps. Vicente Nunes de Trujillo.
El sábado en la mañana, los pastores visitantes pudieron conocer el muelle artesanal, el malecón y fraternizar jugándose un partido de fulbito con los pastores locales, para continuar en la tarde con los temas sobre la “Unidad de la iglesia y sus dificultades” por el Ps. Vega de Chepén y “El ministerio quíntuple y el llamado de Dios” por el Ps. Córdova de Trujillo. En la noche, además de la Palabra desafiante que dió el Ps. Córdova, se culminó con una fiesta de alegría con la presencia de varios jóvenes de la Misión Renuevo que con cantos, silbatos, bombos y banderas llegaron de Trujillo para “revolucionar” la ciudad de Pacasmayo. ¡Gloria a Dios!
Estuvieron presentes desde Trujillo, los pastores: Jorge Pérez, Jorge é Ildaura Llerena, Luis é Isabel Rodríguez, Ronald Rodríguez, Robert Moreno, Vicente y Simone Nunes, Reynaldo y Teresa Córdova, Julio y Sandra Zárate , Vicente Otiniano y Hernando Aparicio, quiénes están comprometidos con llevar la bendición a los demás lugares de la Región.
Este evento nos ha marcado a todos los asistentes y nos desafía a seguir efectuando Jornadas unidas de oración, predicaciones públicas y eventos evangelísticos en lo sucesivo, creyendo que el mismo Dios que en otros lugares hace maravillas, también las hace aquí en el Perú ¡Aleluya!.
La estadía fue muy placentera para los visitantes y la atención y servicio de alimentación de parte del Ps. Luján y su esposa Wendy en su Restaurant “El Charro” fue de primera, a lo mero mero Méjico, pero también mixtificado con peruano y americano. ¡Gloria a Dios!
