jueves, 18 de agosto de 2011

ENCUENTRO MINISTERIAL DE AGOSTO: LINDA COMUNION Y UNA DESAFIANTE PALABRA

PR. J. Pérez 17-Ago-2011

Oportunidad para disfrutar una linda comunión y escuchar una desafiante Palabra, fue el Encuentro Ministerial realizado el miércoles 17 de Agosto en las instalaciones de la Iglesia "Santuario", Bolívar 945, Centro histórico, Trujillo.

Este Encuentro mensual, empezó a las 9 a.m. con un abrigador café y un par de deliciosos sándwich, continuando con una palabra de bienvenida de parte del PR. Elías Riojas, un tiempo de hermosa alabanza y adoración, siguiendo con buenos anuncios del avance ministerial de las iglesias y ministerios como el próximo Diplomado sobres estudios sociales y políticos del SEL-Lima proyectándose a Trujillo, las facilidades de la Librería el Inca en Trujillo, la próxima é importante 8va. Maratón de Oración y Lectura de la Biblia, entre otros. En cuanto a la 8va. Maratón de Oración, el Hno. Koky Rodríguez mencionó que del 23 al 26 de Noviembre próximo, la Plaza de armas de Trujillo, nuevamente se constituirá en un altar para elevar oración a Dios y proclamar su Palabra y pidió que los pastores y las congregaciones estén preparándose para su plena participación en estas 72 horas de presencia de Dios en el centro de la ciudad. 30 días antes del evento, a las 10 de la noche, se estará orando en el centro de la Plaza. Enseguida, se entregaron los credenciales de Miembros de la FRAPILL a los pastores Elías y su esposa Dany Riojas. Más adelante, se escuchó la reflexión sobre el imperativo de la "Unidad" para un testimonio de bendición en nuestra ciudad y luego se avizoró la "violencia" existente en nuestro medio, pero no sólo "afuera", sino también, en el ámbito cristiano, cuando se fuerza la conducta del creyente, lejos de la voluntad de Dios con criterios "humanos" como si fueran doctrinas, seccionando el Cuerpo de Cristo hacia extremos que no permiten un impacto mejor en la ciudad con el evangelio, terminando con la exhortación de que hay que ser violentos pero para "arrebatar el reino de los cielos". En ese espíritu de fraternidad y comunión, finalizó este hermoso cónclave ministerial dando gracias a Dios. ¡Maranatha!