Ps. Jorge Pérez R.
Los trabajadores de la Empresa GRUPO GLORIA, en la localidad de Cartavio habían realizado una primera huelga por aumento de salarios en Diciembre del año pasado con resultados violentos de parte de algunos elementos que aprovecharon esta paralización para robar productos, artefactos de los domicilios de Jefes laborales, romper oficinas, quemar una moto y herir a un trabajador. La situación era tensa y generaba un clima hostil é incierto en la población no solamente para los que dependen directamente de la Empresa, sino indirectamente, a todos los habitantes de ese pueblo trabajador.
Ante esa situación, en el corazón del Ps. Julián Alfaro, del Ps. Walter Jara y luego en los corazones de más pastores, el Espíritu Santo puso el sentir de promover un tiempo de oración a Dios de parte de las congregaciones juntándose en un lugar público. Con el apoyo de la Fraternidad de Pastores de la Libertad-FRAPILL, se decidió efectuar una “Jornada de Oración por la paz y el desarrollo”, fijándose el viernes 12 y sábado 13 de Febrero.
Un día antes de la Jornada, nuevamente los trabajadores entraron en huelga, esta vez por el despido de dos dirigentes sindicales que promovieron el anterior paro.
El Viernes 12 de febrero, a partir de las 8 de la noche, en la Plazuela 24 de Junio, lugar céntrico de Cartavio, se inició la Jornada de Oración por la Paz y el Desarrollo, adorando a Dios con el Himno “Cuan grande es él”, seguido del Himno Nacional y luego con la dirección del Grupo de Música local, las canciones “Poderoso” y ”Maravilloso” secuenciada con tiempos de oración dirigida por los pastores participantes de Cartavio: Julián Alfaro, Feliciano Sánchez, Eleuterio Ríos, Víctor Estacio, Luis Robles, Walter Jara y Hulda Vargas.
Desde Trujillo, se hizo presente una Delegación integrada por: el Ps. Jorge Llerena, Luis é Isabel Rodríguez, Abigail Pérez y el Ps. Jorge Pérez.
Fué hermosa la presencia de Dios descendiendo sobre el estrado levantado con el lema “Ante la crisis, sólo Dios” y en el ámbito de toda la plazuela hasta dónde llegaron ancianas y ancianos, jóvenes con globos blancos simbolizando la paz, niños y hasta bebés en brazos de sus madres, para hacerse presente y participar en esta Jornada de clamor por la intervención divina ante esta situación problemática y peligrosa en esta comunidad.
Con lágrimas en los ojos, profunda tristeza por el alejamiento de la gente de los caminos de Dios y un profundo anhelo de paz y tranquilidad social, los hermanos elevaron sus oraciones al cielo durante dos horas cada noche, terminado las secuencias con una oración unida de agradecimiento y bendición.
El Sábado se leyó la “Declaración por la paz y el desarrollo social” considerando lo que dice la Palabra de Dios tanto a la Empresa y a los trabajadores y el pedido de volver al Señor para que tenga misericordia y bendiga al Pueblo de Cartavio, terminando con una oración unida y Declarando la influencia del Reino de Dios a través de la Iglesia, aunque en lo natural demora, en lo espiritual, ya se decidió y se manifestará. ¡Gloria a Dios!
