Ante la ola delincuencial que ha sobresaltado a nuestra ciudad en los últimos días y que origina estudios, programas y comentarios periodísticos sobre “inseguridad”, la Comunidad evangélica se pondrá de rodillas ante JESUCRISTO, Señor de señores para pedirle que traiga orden y paz y perdón, pero a la misma vez, armados con el Espíritu de Dios nos levantamos para reprender y echar fuera las fuerzas espirituales de maldad que tratan de establecer una “estructura delictiva de maldad” en nuestro medio.
Es la hora de efectuar una “enérgica protesta” a nuestra manera, en contra de esta situación y para ello hacemos un llamado a todas las congregaciones a unirnos en la Plaza de Armas de Trujillo, el miércoles 30 de setiembre a partir de las 7 de la noche.
En el transcurso, se leerá una Declaración de Apoyo a las autoridades en su lucha contra el mal.